Pavimento continuo de microcemento: Consejos para un correcto mantenimiento

Todo tipo de suelos deben tener un mantenimiento regular con el fin de no perder sus características iniciales y que su apariencia siga siendo la buscada. Esto no es una excepción en el pavimento continuo de microcemento.

A continuación, nos centraremos en los cuidados que requiere concretamente este material. Aportaremos los principales consejos sobre las tareas de mantenimiento que hay que hacer a lo largo del tiempo.

Cuando la instalación del pavimento continuo de microcemento es reciente

Cuando el microcemento se instala no obtendrá su máxima capacidad de resistencia química y de dureza hasta pasado el primer mes.

Por esta razón, durante las semanas iniciales habrá que guardar una serie de precauciones importantes. De lo contrario, el suelo podría sufrir desperfectos irreversibles.

En el momento en el que se cumplan las 48 horas desde la aplicación del sellador ya se podrá circular sobre el pavimento continuo de microcementp pero con cierto cuidado. Realmente, hasta una semana después de esta aplicación no será totalmente seguro que haya tránsito de personas.

Otro consejo que podemos ofrecer es que evite lavarlo con productos así como evitar derramar ningún líquido ya que podría intervenir negativamente en el proceso.

Cabe destacar también la importancia de airear el ambiente para que el vapor de agua que produce la condensación de este material no afecte a su asentamiento.

Durante la primera semana lo mejor será proteger el suelo con papeles y cartones evitando la adhesión de humedad y el rallado. En este periodo de tiempo ya se podrá lavar el pavimento, pero con mucha suavidad y únicamente con agua sin ningún otro producto, todavía es delicado y se corren riesgos.

Todavía se debe evitar que se derramen líquidos además de evitar propinarle golpes o que se produzcan caídas de objetos pesados. Por último, la temperatura también debe controlarse para que esté por encima de los 15 grados centígrados en todo momento.

Durante el primer mes

En este periodo no es demasiado recomendable arrastrar muebles sobre el pavimento continuo de microcemento ya que esto podría alterar la planitud y la apariencia de este pavimento. También se debe evitar cualquier acción similar que impacte de forma violenta sobre la superficie. Además, no está de más protegerlo del mobiliario que tenga patas de metal o afiladas.

En la medida de lo posible, las patas o elementos afilados sobre el pavimento podrían recubrirse con fieltro para que no haya un contacto directo. De igual forma hay que intentar evitar los objetos cuyas superficies de contacto sean abrasivas o tengan un peso considerable.

Si se necesita limpiar, podrá hacerse con agua y jabón o detergente neutro, todavía es una práctica delicada en este periodo de tiempo. Por último, es recomendable mantener una temperatura superior a los 15 grados centígrados. Esto ayudará al correcto asentamiento del material. Lo más aconsejable es que durante el primer mes se guarden todas las precauciones posibles. Este momento en el tiempo es crucial para conseguir que el asentamiento del material sea óptimo. El pavimento continuo de microcemento quedará impoluto si se siguen estas medidas de prevención durante las primeras etapas de mayor riesgo.

El mantenimiento del pavimento continuo de microcemento a largo plazo

Algo importante a destacar es que los cuidados que necesita este suelo son muy parecidos a los de los suelos de parqué de madera natural o similares. Así pues, hay ciertos consejos o recomendaciones a seguir para mantener adecuadamente este tipo de superficie a la larga.

Conviene evitar encharcamientos y humedades, ya que el microcemento no es compatible con la exposición prolongada al agua, pues esto podría desgastar o erosionar el sellado y dar lugar a problemáticas filtraciones de agua.

También se deben evitar los elementos que puedan rayar el suelo como los granos de arena o piedras de pequeño tamaño. Estas podrían introducirse al ser arrastradas por los zapatos o la ropa al caminar sobre el pavimento. Para evitarlo se puede colocar un felpudo que proteja de estos elementos.

Al mover los muebles también es aconsejable tomar ciertas medidas, procurar levantar y apoyar en lugar de arrastrar las piezas por el pavimento pudiendo erosionarlo. Al arrastrarlos su apariencia puede verse comprometida. También es recomendable evitar los golpes o roces con elementos duros que de igual manera podrían perjudicar su brillo y color.